Viaje

Si es cierto que todos los caminos conducen a Roma, presiento que a la vuelta se llega al amor. Pero el regreso casi siempre es durmiente así que puede que haya sido un sueño. La pesadilla es el tropiezo del descanso que atraviesa descalzo un montón de vidrios. La ventana del colectivo es un televisor de paisajes pasajeros que nunca viajan, que siempre miramos. La vista se ve en pequeños monitores, mientras los padres vigilan que los chicos no maltraten la máquina de café. Algunos ansiosos no dejan de revisar los carteles verdes en todo momento, otros siguen con el asiento atrás (de la ilusión). A fin de cuentas, todos guardan las mejores intenciones en el equipaje. Sigue el viaje. Hay un destino seguro para todo pasaje, el futuro. Esperan las llegadas, desesperan las salidas. ¿Por qué se harán tan lentas las idas? En el mismo interno van los que vienen y vuelven los que se van. Los diarios distraen a varios, o bien guardan los recuerdos del resto. Ya quedaron atrás las despedidas. Sigue la vida. Faltan kilómetros para llegar a la felicidad.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Me emocionas cukilin. Una fuente de expresion profunda y admirable.
Te quiero mucho
Pachi

Anónimo dijo...

Cuqui muy real!!! Super descriptivo.
Besos
Mechi

Anónimo dijo...

es el viaje de la vida que estamos empezando a recorrer. Quizas deberiamos entender que muchos estamos haciendo el mismo "viaje" y se pueden encontrar muchas coincidencias entre nosotros.

Abrazo

Ruso

Anónimo dijo...

buenisimo me encantoooooo
la pocha

Anónimo dijo...

Linda reflexion de vida amigo! vamos por esos kilometros...

Pauli.