escapar
Publicado por Fernando (Cuqui) Espinosa en 10:23
USH
Con el tema de la luz y el horario se te puede complicar si vas en la antesala del invierno, pero se sobrelleva. En la ladera se eleva Arakur, nombre de guerrero, casi custodiando a la magnífica Ushuaia; o mirándola con desdén, no sé bien. El contacto con lo natural se hace inevitable: el paisaje camina, se patina y tropieza. Lo admirable se vuelve palpable y las vistas te atrapan, resultan hipnóticas. Se rinden la mente y el cuerpo, todo es inabarcable, te desborda. Mas no te cansa, no pesa. El frío te mantiene alerta para no perder de vista ninguna señal. El ruido es un puñal, el silencio un manantial: brota. El que se alborota no gana, me tenés que creer.
Estuve en el fin del mundo y es extraordinario. Bienvenido el apocalipsis. Sin mucho más arte que un mapa y un guía devoto del funk, se llega a cualquier escenario. Ninguno defrauda. De paso por la Laguna Esmeralda nos desafió el hielo, un oponente de cuidado. Respeto. Se debe medir cada paso, no descuidar pisada alguna, una decisión tras otra, pero que tampoco pesan, sino que alivianan la mente, la pueblan de cosas puras y permiten un escape. Incluso una caída se disfruta cuando el aterrizaje fue previsto. En última instancia que sea una figura para volver a ponerse de pie, para estar más atento, para reforzar la concentración y forjar una mejor estrategia hacia el objetivo.
El viaje de cada uno es el de todos. Puede que hayas llegado con una mochila llena de agotamiento pero en el bosque retumba el consejo de un viejo que acaricia su barba: el camino de la introspección es por allá y el revisionismo de ideas su vecino. La mejor excursión es la del senderismo conceptual. Habría unas charlas en septiembre. Hay agua estática y otra que fluye. Uno pisa turba y continúa. Se presentan atajos, desvíos, señuelos, letreros. Los "males" son en realidad presunciones, miedos o diagnósticos equivocados. Tal vez una decisión errada no es más que falta de información.
La meta es muy personal, el trato plural. El sistema se presentó como tal: acuerdos, opinión, queja, reconocimiento, colaboración... un contrato espiritual. Confianza y roles. El regreso de toda expedición deja algo más de sabiduría. También el desgaste del cuerpo, el reto y el premio como fórmula virtuosa. La comida corona siempre el tesón de la expedición. Un brindis da lugar a los cuentos de una historia, que todos fuimos a buscar. Pisamos el barro del fin del mundo y plantamos un inicio.
Publicado por Fernando (Cuqui) Espinosa en 11:15
publicación olé
Dejo aquí un texto que apareció en el suplemento Olé Amateur, del diario deportivo argentino.
Publicado por Fernando (Cuqui) Espinosa en 11:02
Bagual
Publicado por Fernando (Cuqui) Espinosa en 9:11
¿Llueve?
Llueve sobre mojado, ok. Le sigue lloviendo al corazón, bueno. ¿Dónde va la gente cuando llueve? Están lloviendo estrellas, mirá vos. Llovía, como la penúltima vez. Básicamente, esta lluvia de mierda no quiere parar. I´m singing in the rain… qué bueno! No culpes a la lluvia, no es responsable. La lluvia no es exclusiva de noviembre, aunque esa es muy buena. Lluvia cae lentamente sobre mí, me indigno. La otra noche te esperé bajo la lluvia dos horas, mil horas, como un perro. Ojalá que llueva café en el campo, porque muchas cosechas se arruinaron. Ojalá que llueva, que crezca el cucumelo… nadie estaría deseando esto. Viento, dile a la lluvia, que quiero volar. Mientras tanto, en tus ojos no ha parado de llover. ¿Have you ever seen the rain? Caramba, vaya que sí. ¡It´s raining men! ¿Aleluya? En fin… La vieja está en la cueva, que llueva. No, mejor no. Iban a llover inversiones, keep waiting. Yo vi a… no te digo.
Publicado por Fernando (Cuqui) Espinosa en 10:00
Hay momentos
Si te desarman el cuore es muy probable que, en la reconstrucción, salga una versión mejorada. Hay un momento en la vida (bueno, no, son varios) que hacemos lo que podemos. Cuando llegas a la esquina en que se cruzan tus deseos y la realidad es prudente mirar bien antes de cruzar. Puede pasarte que la ciudad aún esté dormida (por eso mejor circular de mañana o madrugada) y entonces encuentres lugar para estacionar tus sueños cerca de tu casa, que tuya o alquilada da igual. O, quizás, en la hora pico te toca bocina una mina, o un chico te roza con la bici, pero resulta que es buen mozo y no te enojás. Son momentos, no? Puede que en ese mismo corner, también, creas que estás asomando la cabeza, que llega un centro medido de gol y en realidad te venía midiendo el central contrario que te duerme de un codazo; digamos tu jefe que no te da el bono para las vacaciones. Hay otro momento en la vida (miento, son algunos) que hacemos lo que queremos. En esos, somos más felices. En esos yo como asados, juego a la pelota, contemplo algún tipo de arte, o a una tipa que parece obra de arte o, cuándo no, escribo pavadas como esta. ¿Y vos qué hacés con tus momentos?
Publicado por Fernando (Cuqui) Espinosa en 9:41
Cosas Menores
Publicado por Fernando (Cuqui) Espinosa en 9:46
Los Sensibles
Publicado por Fernando (Cuqui) Espinosa en 9:03
Derecho
Publicado por Fernando (Cuqui) Espinosa en 15:45
esa persona
Publicado por Fernando (Cuqui) Espinosa en 19:29